“La comercialización de vehículos nuevos reportó un comportamiento dispar durante agosto del presente año, en donde la venta de vehículos livianos retrocedió, aunque a menor ritmo, mientras que la venta de vehículos menores aumentó y la de pesados tuvo un desempeño mixto”, así lo señaló Alberto Morisaki, Gerente de Estudios Económicos de la Asociación Automotriz del Perú (AAP).
Añadió que, de acuerdo con información oficial de SUNARP, la venta de vehículos livianos nuevos registró 12,775 unidades vendidas en agosto de 2024, cifra inferior en -12.6% respecto a similar mes del año anterior. Por su parte, durante los primeros ocho meses del 2024, las ventas acumuladas se situaron en 99,359 unidades, -13.4% por debajo de lo anotado en similar periodo del 2023. Al desagregar la información se puede apreciar que la venta de SUV sumó 48,013 unidades durante el periodo analizado, disminuyendo en -7.2% a tasa anual. Igualmente, las ventas de pick up y furgonetas llegaron a 19,246 unidades (-13.8%), la de automóviles fue de 18,189 unidades (-25%) y la de camionetas retrocedió a 13,911 unidades (-15.1%).
“El comportamiento registrado en el octavo mes del presente año mostró una ligera recuperación respecto a los últimos meses, el mismo que habría sido impulsado por un mejor comportamiento del consumo privado, el cual estaría empezando a anotar un mejor desempeño durante el segundo semestre respecto al primero, en línea con la mejoría de la demanda interna, así como por los ingresos extraordinarios provenientes de las AFP, CTS, además de las gratificaciones de julio”, indicó Morisaki.
Por otro parte, en el sector de vehículos pesados, la venta de camiones y tractocamiones se ubicó en 1,260 unidades al cierre de agosto último, lo que provocó una caída de -11.3% a tasa interanual; mientras que durante el periodo enero a agosto del 2024, las ventas de dichos vehículos se situaron en 10,015 unidades, registrando una expansión de 1.9% en relación con similar lapso del año anterior. El aumento de las ventas de los referidos vehículos en lo que va del presente año se explica principalmente por el buen desempeño de camiones de mayor peso y tractocamiones, ello por la recuperación de sectores económicos muy golpeados el 2023, como pesca, agro, construcción (gasto público), entre los más importantes; además de minería.
Del mismo modo, la venta de minibús y ómnibus reportaron 221 unidades vendidas en agosto del presente año, superando en 6.3% al nivel observado en similar mes del 2023. Además, durante los primeros ocho meses del 2024, la comercialización de los referidos vehículos avanzó a 1,812 unidades, cifra mayor en 18.3% en comparación con igual periodo del año pasado. El significativo repunte de las ventas en dicho rubro se explica por la recuperación de actividades económicas como el transporte de personas y turismo, los mismos que fueron severamente afectados en los últimos años por diversos acontecimientos (pandemia, conflictos sociales, y eventos climatológicos) y que en este 2024 vienen desarrollándose sin eventos adversos de por medio.
Finalmente, resaltó el vocero gremial, las ventas de vehículos menores totalizaron 31,768 unidades en agosto último, y anotó un crecimiento de 11.3% interanual. Cabe precisar que dicho nivel de ventas mensual viene siendo el más alto en lo que va del año. Por su parte, entre enero y agosto del 2024, las ventas acumuladas de dichos vehículos sumaron 224,623 unidades, número inferior en -2.2% respecto a igual lapso del 2023. Por tipo de vehículo, se observa que las ventas de motos llegaron a 157,909 unidades (-1.7%) y la de trimotos fueron 66,714 unidades (-3.4%). La comercialización de los referidos vehículos viene recuperándose paulatinamente durante el presente año, lo que nos estaría indicando que el proceso de normalización de la demanda por la atraviesa desde el 2022 estaría llegando a su fin, a lo que se sumaría nueva y renovación de flotas por parte de diversas entidades públicas en el país.
Para los siguientes meses, añadió, se espera que las ventas de vehículos nuevos mejoren ligeramente, en línea con el mayor dinamismo que mostraría la economía peruana. La recuperación proyectada de la inversión privada en los siguientes meses se traduciría en mayor generación de empleo e ingresos, y con ello aumento del consumo privado. Del mismo modo, resaltó que, al tener un nivel de inflación controlada y dentro del rango meta, así como una tasa de política monetaria con muchas posibilidades de ser recortada y que se reflejaría en menores costos de financiamiento, “las condiciones estarían dadas para que en el segundo semestre el nivel de ventas de vehículos sea levemente mejor que en el primero. No obstante, persisten algunos factores de riesgo que podrían alterar dicho panorama, entre los que se encuentra la incertidumbre y poca credibilidad respecto a la política económica, medidas populistas del Congreso, deterioro de las cuentas fiscales, entre otros, que podrían afectar negativamente el comportamiento del sector”, sentenció.